Historia de San Pedro Lagunillas
La historia del municipio de San Pedro Lagunillas nos permite conocer a detalle qué fue lo que pasó en sus antepasados, en donde de acuerdo a la información obtenida, podemos ver que todo comenzó siendo un lugar totalmente deshabitado, en donde lo único que se podía apreciar era la grandeza de su naturaleza. Con el paso de los años esto fue cambiando, hasta que llegó el primer gurpo de indígenas que buscaron un lugar para poder asentarse, vivir y desarrollarse poco a poco. El nombre del municipio comenzó siendo Ximochoque y significa lugar de bules amargos, así lo tuvo durante mucho tiempo. Sus habitantes comenzaron a desarrollarse, hicieron que la zona también creciera y la fueron transformando mediante las construcciones de sus casas, las zonas donde ellos consideraron que eran los puntos de reunión y más.
Cuando se dio la llegada de los españoles al territorio mexicano y en particular en el municipio señalado, los grupos indígenas que vivían ahí fueron sometidos porque los españoles querían hacer la conquista de todo el país y lo lograron porque ellos contaban con elementos de guerra más desarrollados que los indígenas de México. Fue entonces cuando la zona fue rebautizada con el nombre de "San Pedro Lagunillas" en honor al primer Conde de Miravalle, Pedro Alonso Dávalos Bracamonte y Uibarri, debido a que fue la persona que dio los recursos necesarios para llevar a cabo la construcción del templo en el municipio, además de que se tuvo la referencia de las lagunas de agua clara que existen en ese lugar, las cuales siempre han sido muy importantes para las personas, en donde los índigenas y españoles lograron sobrevivir gracias a la pesca que se realizaba en esas zonas de agua.
En el año de 1582 la zona del municipio formó parte de la alcaldía de Chimaltitán, siendo su cabecera la que estaba en la parte oriente del Real de Acuitapilco y estaba muy cerca del río de Santiago. Dicha administración estaba conformada por los municipios de Santa María del Oro, algunas porciones de los municipios de La Yesca, Ahuacatlán y no podía faltar San Pedro Lagunillas, en donde los diversos poblados que eran parte de eso fueron Tequepexpan, Zapotanito, Santa María del Oro, San Luis, Pochotitán, Tetitlán, San Pedro Lagunillas, Huajimic y Guaynamota. Con el tiempo la situación que se vivió en la zona fue muy crítica porque se dio una crisis en donde el trabajo minero tuvo muchos problemas en el Real de Chimaltitán, lugar en donde se realizaba dicha actividad. Posteriormente, en 1650 se tuvo que cambiar la sede administrativa de la alcaldía y se elegió a Tequepexpan para ser el lugar adecuado en donde debía estar, pero siguió conservando la misma jurisdicción que ya fue mencionada.
Así pasaron más años hasta que otra fecha importante fue en 1722 cuando las personas comenzaron a llamar alcaldía de Tequepexpan y otras le decían Santa María del Oro, mismo que cuando se terminó el siglo XVIII tuvo que se eliminada debido a la situación complicada que se vivió en ese entonces en el territorio, por lo que el municipio fue incorporado al de Compostela. Esto fue algo complicado por los habitantes de San Pedro Lagunillas temían porque sucediera lo mismo con ellos pero esto no pasó, debido a que cuando se creó la Constitución del Estado Libre de Jalisco, así como el Plan de División Provisional del mismo estado que se implementó en el mes de mayo de 1824, el municipio de San Pedro Lagunillas logró tener su propio gobierno y ayuntamiento, haciendo que todo fuera mucho más fácil para sus habitantes, haciendo que otras localidades quedaran adscritas como fueron el caso de San José del Conde, Tepetiltic, Los Ocotes y Chapalilla.
La historia señala que fue en esa época en que San Pedro Lagunillas se formó y estableció como un municipio con una jurisdicción, que en la actualidad continúa teniendo, lo cual forma parte de un aspecto básico para el conocimiento de su progreso. Pero a pesar de eso, esta decisión política no tuvo los resultados o el apoyo esperado, debido a que en el año de 1837 cuando el gobierno federal acordó que la demarcación de las mismas se circunscribiera a la que tenían las parroquias eclesiásticas, comenzó el caos en muchas partes de la región y de otros estados, situación en donde los gobiernos y habitantes de varios lugares comenzaron a tener problemas sociales, económicos y hasta religiosos. Fue así como San Pedro Lagunillas junto con lugares como Zapotán, Mazatán, Huicicila, San José del Conde, Miravalles, Embocadero, Las Varas, La Cumbre, Tepetiltic y Los Ocotes, formaron territorios que integraron la extensa parroquia de Compostela, porque a pesar de que muchas personas trataron de oponerse a los mandatos del gobierno federal, no pudieron hacer nada y eso se llevó a cabo como fue dado a conocer.
De esta forma San Pedro, con sus localidades dependientes ya citadas, eclesiásticamente pasaron a depender de Compostela con la categoría político administrativa de Vicaría, misma que conservó hasta 1921 en que tuvo lugar la formación de la nueva parroquia de San Pedro. Aunque como se verá más adelante, a los pocos años hubo cambios en la administración del gobierno federal que nuevamente favorecerían el resurgimiento de la municipalidad que se trata. Así las cosas, este período de gobiernos a los que se les identificó como centralistas toca a su fin en 1846 cuando se dispuso que la Constitución Federal de 1824 rigiera nuevamente los destinos del país, con lo cual San Pedro verá nuevamente la luz como municipalidad. Conforme avanza la segunda mitad del siglo XIX se presentaron algunos cambios en este municipio.
Eso hizo que la zona de Chapalilla se tuviera que incorporar a la de Santa María del Oro, mientras que otras localidades comenzaron a tener ayor poder al interior de su territorio como fue el caso de Coastecomate, La Quebrada, Las Guásimas y Tequilita. En ese entonces era la última década del siglo XIX cuando la hacienda de San José del Conde logró incrementar el número de habitantes, porque comenzó con muy pocos y esto fue cambiando con los años, en donde pasó de 600 a 1,247 habitantes en ese entonces, lo cual continuó incrementándose. El resultado del proceso de desarrollo y modernización de la zona, inlcuído el municipio de San Pedro Lagunillas fue de gran relevancia para todos, porque gracias a diversas actividades económicas, sus habitantes lograron crecer en muchos aspectos, como el económico, profesional, personal y familiar.
Fue a finales del mismo siglo cuando se construyó en el casco de dicha unidad de producción, una fábrica de tequilaademás de que se crearon varias casas para los trabajadores y también se hizo una nueva capilla para ofrecer servicios religiosos a las personas. Cabe decir que la religión siempre fue algo fundamental en la vida de todos, por lo que las órdenes religiosas que llegaron a San Pedro Lagunillas hicieron todo lo posible por evangelizar la zona, así como otras más del estado de Nayarit y del país en general. La religión logró desarrollarse y fue por eso que se dieron otras construcciones emblemáticas que a pesar del paso de los años, continúan de pie y teniendo un esplendor mágico y especial que es admirado por todas las personas que gustan de construcción históricas y religosas.
De esa manera fue como el municipio señalado creció continuamente y también surgió el pueblo de Tequilita, en donde un grupo de familias procedentes de la ciudad de Tequila llegaron a la hacienda de San José del Conde con la finalidad de trabajar, lo cual se dio principalmente en el cultivo del agave. Más tarde se dieron otros asentamientos humanos que fueron a otras épocas y también se relacionaron con el paso del ferrocarril como Cerro Pelón y la Estación del Conde. Todos los cambios que se dieron en diversos ámbitos en el municipio, hizo que se delimitara de la forma en cómo se conoce actualmente. Sin duda podemos decir que San Pedro Lagunillas es un lugar con muchas tradiciones aledañas que a pesar de que han pasado muchos siglos, las generaciones más grandes transmiten sus creencias a las jóvenes para continuar con el esplendor especial que tiene y ha logrado conservar este mágico lugar.
Como una forma de señalar un ejemplo de lo dicho, está el famoso carnaval del municipio y que se comenzó hace mucho años, haciendo que con el tiempo se haya vuelto una tradición porque su nivel de importancia pasó a formar parte de la identidad de San Pedro Lagunillas y por eso se toma en cuanta es esta sección, además de que es un motivo de gran relevancia que desde que se comenzó a realizar, ha logrado atraer la atención de las personas, haciendo que de alguna manera se estimule el turismo en la región. La historia señala que esta festividad local se comenzó a realizar a finales del XIX y desde sus inicios fue un gran evento que logró reunir a muchas personas, siendo considerado como algo muy atractivo por las familias, en donde todos podían acceder mediante una carretera que no tenía mucho tiempo de haberse construído, siendo en el año de 1894, la cual unía a la comunidad de La Labor con San Pedro Lagunillas.
Más tarde se dio otro acontecimiento importante en el municipio, siendo en el año de 1971 cuando el gobierno de ese entonces tomó la decisión de construir la carretera de Chapalilla a Compostela, e la cual se respetaron los elementos de su alrededor porque fueron considerados como partes básicas de la historia de la región y cuando se pasaba por la periferia de la cabecera municipal éstos se podían ver, hasta que fueron considerados como parte de su patrimonio cultural e histórico. Un ejemplo de esto es que en esa zona se encuentra el casco histórico del antiguo pueblo de San Pedro con su plaza y al centro de ella, una estriada columna que tiene los recuerdos de los diversos ataques armados que sufrió la localidad, en donde tuvo mucho que ver lo realizado por parte del ejército que en ese entonces era comandado por Manuel Lozada. Eso es parte del pasado histórico de una región que pasó por muchas cosas pero gracias al esfuerzo de sus habitantes y a su unión, logró salir adelante poco a poco, convirtiendola en un lugar con cambios muy marcados pero necesarios en cada época.
Además de eso, la historia nos muestra que existe un segmento más antiguo en donde se recuerda cómo se dio el surgimiento de los asentamiento, siendo el primer motivo que se conoció el de hacerlo con el propósito de ser el punto de enlace en la comunicación del altiplano compostelense con el camino real que iba de Tepic a Guadalajara, en donde se conectaba con el punto que era conocido como Chapalilla o la hacienda de La labor, en donde muchas personas trabajaron para poder ganarse unos pesos para adquirir los alimentos necesarios para darle de comer a sus familias. Cabe señalar que en el municipio también se encuentra un templo que se contruyó en siglos pasados y que fue construido en cantera porque éste era un elemento muy típico y que se puede apreciar en muchos otros templos o iglesias del estado nayarita y del país en general.
El templo que se encuentra en San Pedro Lagunillas es el que tiene su mismo nombre porque está dedicado al santo "San Pedro" y se construyó por una órden religiosa proveniente de españa, con la finalidad de evangelizar a la población y hacer que la religión católica fuera parte básica en sus vidas. El haber construído el templo señalado hizo que las personas de la zona lo visitaran continuamente, cuya construcción destacó desde su creación porque fue hecho de piedra y con cimientos fuertes que lograron sostener algo magestuoso, el cual cuenta con una torre que tiene dos niveles, en donde la que se encuentra a un costado izquierdo, tiene una Cruz de Lorena y es considerada como típica en la región porque se puede observar en otros templos o iglesias del estado de Nayarit. Es precisamente ese templo en donde se recuerda la presencia parte de la historia de del municipio, además de recordar a Bernardo de Balbuena que fue un escritor y poeta que estuvo en ese templo en los años que van de finales del siglo XVI y principios del XVII.
La historia también señala que el origen del templo de San Pedro tuvo que ver con la presencia de padres seculares que pertenecían a una orden religiosa que no era la de los franciscanos, quienes a pesar de esto han logrado fundar grandes conventos e iglesias en muchas partes, como por ejemplo los que están en Ahuacatlán y Jala. En el caso del templo mencionado anteriormente, esta contrucción fue bautizada en el mes de diciembre de 1837 por Bibiano Dávalos, quien fue el hijo de Ignacio Dávalos y de María de Jesús López. Más tarde se construyeron otros edificios de la zona centro de San Pedro Lagunillas, siendo los espacios administrativos de la vida comunal como el palacio de gobierno y su plaza principal, los cuales estaban rodeados de enormes fincas de adobe, tenían puertas de encino y mezquite, además de detalles antiguos.
Parece que el tiempo se detuvo en lo que es la laguna que está en el municipio, siendo sus alrededores las zonas en donde las personas han sabido aprovechar la naturaleza del lugar para realizar diversas actividades al aire libre. Parte elemental de su gran historia también se encuentra en la gastronomía, la cual ha sufrido ciertos cambios con el paso del tiempo, debido a que desde siglos pasados se comenzaron a hacer diversos platillos típicos que con el tiempo fueron teniendo mucha popularidad hasta que se fueron convirtiendo en tradicionales. Algunos ejemplos de eso son los platillos como los mariscos en sus diversas variedades y también está la mojarra tilapia frita que es chicharrón de pescado y esto es algo muy típico del municipio, pero tampoco podían faltar otros alimentos mexicanos como el pozole, las tostadas preparadas con guisados, el menú, entre otros.
El paso de los años han permitido que cada lugar se pueda ir desarrollando poco a poco, en donde tiene mucho que ver el apoyo de los gobiernos que han existido además de la cooperación y colaboración de sus habitantes, siendo en el municipio de San Pedro Lagunillas un lugar en donde gracias a todos, se ha podido salir adelante, conservando y recordando con orgullo la historia que tiene el lugar, además de que hacer que sus tradiciones y costumbres sean mucho más fuertes y se continúen realizando porque son motivo de orgullo para los nayaritas. Finalmente podemos decir que el municipio cuenta con lo necesario para atender a los visitantes, en donde no sólo hay mucha historia por ver y conocer, sino también disfrutar de la música regional, su amplia gastronomía, las danzas típicas y mucho más, en donde estamos seguros de que podrá encontrar y disfrutar del interesante pasado y presente de un lugar que está en constante progreso al paso de los años.